
El número uno del mundo, Magnus Carlsen, se coronó campeón de la primera edición de la Copa del Mundo de Ajedrez de Esports, celebrada en Riad, Arabia Saudita, del 29 de julio al 1 de agosto. Representando a Team Liquid, Carlsen superó a los mejores grandes maestros del planeta en un formato innovador de partidas rápidas (10+0) y desempates por Armagedón, llevándose el trofeo y un premio de $250.000 dólares.
La gran final lo enfrentó al francés Alireza Firouzja, del Team Falcons, quien llegaba invicto al duelo decisivo. Carlsen, sin embargo, mostró una preparación impecable y una sangre fría admirable: ganó ambos sets por 3-1, sin necesidad de llegar al set de desempate. En la primera partida, una jugada imprecisa de Firouzja (21…Da3) permitió a Carlsen ejecutar el brillante 22.Cb8!!, ganando la torre de a8 y tomando el control del match.
El torneo también estuvo marcado por la intensidad emocional. En semifinales, Carlsen venció a Hikaru Nakamura en un duelo épico de siete partidas, mientras que Firouzja había eliminado a Ian Nepomniachtchi y Nodirbek Abdusattorov sin perder una sola partida. La diferencia de ritmo y precisión fue evidente en la final: Carlsen jugó más rápido, con mejor cálculo, y mantuvo un pulso estable incluso en los momentos más tensos.
Con esta victoria, Magnus no solo añade otro título a su legendaria carrera, sino que también posiciona al ajedrez como una disciplina competitiva dentro del ecosistema de los eSports. Su triunfo impulsó a Team Liquid al primer lugar en la clasificación general del campeonato de clubes, superando a los Falcons de Firouzja y Nakamura. El mensaje es claro: el ajedrez digital ha llegado para quedarse, y Carlsen sigue siendo su máximo referente.
Magnus Carlsen, conduciendo las piezas blancas, firmó una brillante victoria en esta espectacular primera partida que presentamos a continuación.